¡Magritte en Bellas Artes!

"El Mundo Invisible de Rene Magritte" es la más reciente exposición en el Palacio de Bellas Artes. Sobra decir que se trata uno de los artistas más importantes del Siglo XX, sobre todo para la corriente surrealista.

En lo personal, desconocía sus tempranos escarceos con el cubismo y la semiótica, aunque pensándolo bien, el surrealismo es casi inseparable de la semiótica.

Magritte juega con la percepción de la representación artística, o con la representación artística de la percepción, y si bien en Bellas Artes no encontraremos "Esto no es una pipa" para ejemplificarlo, ni "El falso espejo", "El modelo rojo" o "Filosofía en el boudoir", esta muestra nos trae como atractivos principales"El hijo del hombre" y "Golconda", pasando por "La gran guerra" y "La memoria", que no recuerdo si la conocía o no, pero que me encantó, entre muchas otras de las 152 que componen la exposición.

Personalmente, destaco la obra que embellece esta entrada, llamada "La voz de la sangre", obra de técnica perfecta que tienen que ver en todo el esplendor de su metro de altura o más.

Al tener frente a mí estas obras no pude evitar recordar lo afortunado que he sido por tener la oportunidad de haber apreciado pinturas de artistas como Leonardo, Van Gogh, Botticelli, Dalí, Van Eyck, Cézanne, Rafael, Caravaggio, Degas, Gauguin, Manet, Picasso y, uno de mis favoritos, Monet.

Pero quizás lo mejor de esta visita en domingo por la tarde, fue ver a muchísimos niños en el Palacio de Bellas Artes. A algunos los vi tan maravillados que me recordaron a mí mismo en las remotas tardes que abrí un par de libros para descubrir a Leonardo y Dalí, los cuales me dejaron una honda impresión. Espero que muchos de estos niños se sigan acercando al arte gracias a Rene Magritte.

Si viven en la Ciudad de México o piensan visitarla, no pueden perderse esta exposición que estará hasta el 11 de julio. No se arrepentirán.