domingo, 7 de agosto de 2011

Midnight in Paris, de Woody Allen

- Eric Lax: ¿Se imagina lo que hubiera sucedido si se hubiera quedado allí? (a vivir en París, en la década de los sesenta)
- Woody Allen: Había que tener un espíritu más aventurero que el mío para hacerlo, y es una lástima. Conozco a mucha gente de mi edad que dice: "yo no me arrepiento de nada" [ríe a carcajadas]. Pues yo me arrepiento de mil cosas [Sonríe] De mil cosas no, pero de eso sí [Acaba con un tono un tanto nostálgico] Habría estado bien.
Conversaciones con Woody Allen; Eric Lax; Random House; 2010

Esta entrevista realizada en 2005 se refiere a la ocasión en que Allen conoció París durante la filmación de What's Up, Pussycat? en 1965, película que él solamente escribió, y que le dejó más frustraciones y casi ninguna satisfacción, excepto haber trabajado con Peter Sellers y conocer París.

Desde entonces Woody, si la memoria no me falla, sólo había regresado allí a trabajar para la filmación de Everybody Says I Love You (1996), cuyo hermosísimo y sublime final de antología se desarrolla frente a la Torre Eiffel.

Ademas, Francia se ha mostrado particularmente más receptivo a todos los trabajos del neoyorquino. Así lo ha manifestado él mismo, y hace un guiño a esa curiosa situación
en Hollywood Ending (2001). En este 2011, y por segundo año consecutivo después de You Will Meet A Dark Tall Stranger, Allen estrenó su nueva obra en Cannes. Y también por segundo año consecutivo, volverá a conquistar a las masas con Midnight In Paris, su primera cinta filmada totalmente en París, continuando así con su etapa europea luego de Match Point (2005), Cassandra's Dream (2007), You Will Meet A Dark Tall Stranger en Londres, Vicky Christina Barcelona (2008) en la Ciudad Condal, y que continuará en Roma con The Bop Decameron (2012).

Sin embargo, ni Londres ni Barcelona recibieron de Woody el tratamiento que recibe Paris, en lo que se ha llamado su "carta de amor" a la Ciudad Luz, argumento que podría confirmarse con la secuencia inicial donde repite lo que hizo con Manhattan (1979), plano tras plano de los lugares más hermosos de la capital francesa.

Si Match Point es hija de Crimes And Misdemeanors (1989), Midgnight In Paris tiene el toque Manhattan combinándolo con una historia que nos recuerda a The Purple Rose Of Cairo (1985), en donde nuestro protagonista evade la realidad ayudado por un poco de magia, presente en la filmografía de Allen en Scoop (2006) y The Curse of The Jade Scorpion (2001), mientras que la nostalgia por el pasado ya la habíamos visto en ésta última, así como en Radio Days (1987).

De nuevo, están todos los elementos de un filme clásico del autor: el miedo a la muerte, la insatisfacción con la vida que se tiene, la infidelidad, la burguesía, aderezado en este caso por encuentros con personajes clave del inicio del siglo XX, y con uno de los repartos más espectaculares con los que haya trabajado -y eso ya es mucho decir-, liderados por un sorprendente Owen Wilson.

Aunque en lo personal la forma de hablar de Wilson me resulta un poco distractora, el protagonista brilla al retratar a un soñador incomprendido por su prometida, que encontrará una respuesta a sus deseos cuando tiene la oportunidad de viajar en el tiempo a una etapa y lugar con los que siempre soñó: París en la década de los veinte, epicentro del mundo cultural en ese entonces, donde vivían los músicos, escritores, pintores y cineastas más importantes del momento.

En este viaje de fantasía, destacan Adrien Brody, inconmensurable en su papel como un artista que prefiero descubran ustedes mismos, Kathy Bathes como Gertrude Stein y, sobre todo, un magnífico trabajo de Corey Stoll como un Ernest Hemingway tocado por la guerra y con una obsesión por los valores y características que requiere un buen hombre y escritor. También está incluido Cole Porter, omnipresente en la obra de Allen, quien casi calca un diálogo de Anything Else (2003) relativo al baladista más prólifico de los Estados Unidos.
Mención aparte merece la siempre efectiva Marion Cotillard como el interés romántico del protagonista; una mujer que pareciera estar hecha a la medida de él. Cotillard enamora a Wilson y a la audiencia con su belleza, sinceridad y deseos de vivir una vida bohemia en París, el personaje más importante de esta cinta, al cual Woody hace justicia al mostrar todo lo que significa caminar y enamorarse por sus hermosas, hipnotizantes y eternas calles.

Cinco décadas después, Allen no deja de sorprender, entrener, maravillar y hacer reír, y como desde hace cincuenta años, nadie puede hacerlo como él.

6 comentarios:

  1. La primera película de Woody Allen que vi fue, efectivamente "Todos dicen que te amo" y amé su visiòn. Sé que para muchos es de sus películas más débiles, pero a mi me encanta que siempre deja su firma de autor.

    Vive para siempre Woody.

    D.

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  2. whaaaaaaaaaat? todos dicen que te amo es unajoya, una maravilla!!!!! =D

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  3. Todavía no ví esta película, y no sé porqué dejo pasar el tiempo sin verla. Ya me voy a hacer tiempo.
    Admito que al principio no me "cerraba" Woody Allen.. pero ahora admito que es genio.

    Me voy a dar una vuelta por el blog, lo acabo de encontrar y ví cosas interesantes.

    Saludos.

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  4. hey! muchas gracias por pasarte! veo qeu también has escrito sobre le Herisson. y There Will Be Blood es una de mis películas favoritoas de toda la vida!!

    sobre Woody... qué te puedo decir, al leer este blog te darás cuetna que para mí es lo máximo

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  5. Excelente película. Y como dice Darina, ¡Viva para siempre Woody!

    Que manera de plasmar su genio en sus películas.

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